Hoy os voy a presentar un libro en el que sólo hay recetas de caldos elaborados por William Ledeuil, un chef francés con estrella Michelín que nos descubre los sabores del mundo a través de su cocina y que en 2010 fue nombrado «Mejor Chef del Año».
La fotografía es de Louis Laurent Grandadam, fotógrafo francés especializado en gastronomía y viajes y los textos de Tiphaine Campet.
El libro, con 224 páginas y un formato de 26,2 x 19,7, fue publicado en octubre de 2016. Las fotografías son sencillas y elegantes. De tapa dura y papel de calidad….Está claro que Librooks ha cuidado mucho esos detalles.
Al principio puedes leer muchos consejos sobre rizomas, cítricos, hierbas frescas, flores, setas, algas, productos deshidratados, especias, etc etc.
Luego están las recetas de caldos de base, caldos esenciales, caldos de ave, caldos de carne, caldos de pescado, de crustáceos, moluscos, verduras, caldos umami (ese sabor que los japoneses definen como sabroso o gustoso y que es lo contrario de ácido) y caldos dulces.
Las recetas son sencillas y están muy bien explicadas. Lo único que puede chocar al principio es que, en la mayoría de ellas, se usan ingredientes que pueden parecer difíciles de encontrar pero si te gusta buscar en los mercados o en las tiendas online, seguro que das con ellos…
Con este libro aprenderemos entre muchas otras cosas a transformar, por ejemplo, un estupendo caldo de cocido o gallina en otro diferente con sólo añadir vinagre de arroz, mirin, chile ojo de pájaro, o piel de cítricos. Nos enseña a ser espontáneos en la cocina y a perder el miedo a mezclar ingredientes.
Sinceramente, creo que es un libro bastante bueno e interesante con el que se aprende más de lo que en un principio parece.
¡Ah! se me olvidaba.. cuando lees el libro te das cuenta de la poca sal que emplea este chef para cocinar. He observado que al utilizar ingredientes con sabores peculiares o potentes, no necesita para nada la sal. Otra cosa que he observado es que no usa muchas grasas y si una receta las necesita, las añade en pequeñas cantidades.
Puede ser un buen regalo para un foodie (no me gusta nada esa palabra, así que la cambio por la expresión amante de la comida y la gastronomía) o para regalártelo a ti mismo/a.
Anímate y échale un ojo aquí.
Seguro que es interesante este libro, miraré a ver si me lo pueden regalar. Un besazo.
Parece mentira que existan tantos tipos de caldos…jajaja… en casa siempre nos quedamos con el cocido de toda la vida. Hay que renovarse, está claro.
Es cierto.. renovarse o morir. Jeje
Un saludo