Este vino dulce o licor de nueces lo hacen mis padres desde hace mucho tiempo. Imagino que es de esas recetas que pasan de generación en generación y de boca en boca.
A mí me parece de lo más original y digno de ser publicado.
Está hecho con vino tinto y azúcar. Ellos compran el vino en una bodega que hay en un pueblo cercano, pero podéis usar el vino tinto que queráis, siempre y cuando sea del año, joven. Aunque el secreto está en su tercer ingrediente, que es el que realmente le da color y cuerpo. Y no es otro que nueces verdes cogidas en junio, por San Juan. Así que, si tenéis un nogal, ¡perfecto!.
Se que uno de mis bisabuelos, creo que el padre de mi abuela materna, metía en el vino unas veces quesos, y otras jamones. Decía que eso lo hacía bueno. Dudo que esto se siga haciendo hoy en día…El caso es que el vino se «comía» la carne y el hueso del jamón y algo así pasa también con las nueces. Que se deshacen….
Lo que si hay que tener en cuenta, si finalmente os decidís a hacer este vino, es que dobla su volúmen debido al azúcar, así que, debéis echarlo en una olla o cazo grande para que no rebose.
Ingredientes:
1 litro de vino tinto joven o de año
400g de Azúcar
2 Nueces verdes y media sin pelar (cogidas en Junio)
1 olla o cazo grande de acero inoxidable o de porcelana, pero con tapadera
Guantes
Cinta aislante
Preparación:
Ponte los guantes y echa en la olla el azúcar y el vino. Remueve.
Cuando el azúcar esté bien disuelta, aplasta y rompe un poco las nueces. Puedes usar un martillo, por ejemplo.
Échalas al vino.
Ahora tapa la olla y precíntala muy bien con cinta aislante. No debe entrar aire por ningún sitio.
Deja la olla en un rincón donde no moleste y te olvidas de ella.
Seis meses después, para Navidad, ya tienes listo tu vino.
Abre la olla y cuela con un trapo limpio o un colador de tela para evitar que caigan restos de las nueces en las botellas donde vayamos a envasarlo.
Te aseguro que su sabor es sorprendente. A nosotros nos gusta tomarlo como en la foto. Echamos un poquito de vino en el vaso y nata montada por encima. Terminamos espolvoreando un poco de canela y acompañamos con un barquillo. Aunque solo, también está muy rico.
Si quieres ver un postre sencillo y rápido preparado con este vino, pinchad aquí.
Va por ti.